
Historia de la dirección de Ballet
El Ballet San Marcos fue fundado en 1964 por iniciativa de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, convirtiéndose en la primera institución universitaria en el Perú en crear una compañía y una escuela de danza. Bajo la dirección del maestro Roger Fenonjois, de la Ópera de París, se establecieron el Ballet Universitario y el Conservatorio de Danza de San Marcos con el objetivo de ofrecer una formación gratuita y completa a futuros bailarines, además de mantener en actividad un cuerpo de baile profesional.
El conservatorio de danza de San Marcos tiene por misión la preparación completa y gratuita de futuros bailarines, así como el mantenimiento en actividad de un cuerpo de baile profesional. Su ambición es la de crecer, superar y alcanzar esa calidad legítima que hace del arte de la danza el vehículo cultural más completo.Roger Fenonjois (Director Fundador)
Desde sus inicios, el Ballet San Marcos se enfocó en el ballet clásico, contando con la guía de destacados maestros que marcaron su desarrollo. Entre ellos, Alexander Plisetski, reconocido pedagogo ruso y exbailarín del Bolshoi, quien aportó con su conocimiento técnico y estilístico en la formación de los bailarines. También fueron fundamentales en esta etapa Rosemary Helliwell, destacada pedagoga en la técnica clásica; Iacob Lascú, maestro rumano con una visión rigurosa de la enseñanza del ballet; y Sara Pardo, importante figura de la danza en el Perú. Otros maestros que contribuyeron con sus enseñanzas al Ballet San Marcos fueron Jane Devonshire, quien dejó su huella en la enseñanza del ballet dentro de la institución.

En 1972, Vera Stastny asumió la dirección del Ballet San Marcos, marcando un hito en su historia al introducir la danza contemporánea en la compañía. Bajo su liderazgo, se diversificó el repertorio y se impulsó un enfoque innovador en la formación de los bailarines, alineado con las tendencias internacionales. Su gestión, que concluyó en 2018, consolidó al Ballet San Marcos como un referente en la danza contemporánea en el país, ampliando su impacto artístico y pedagógico.
A partir de los años 70, el Ballet San Marcos incorporó la danza contemporánea a su entrenamiento y repertorio, ampliando así su propuesta artística. Desde entonces, la compañía ha apostado por la creatividad, la investigación en la danza y la actualización constante con las tendencias internacionales. Para ello, ha contado con la colaboración de reconocidos coreógrafos y maestros internacionales, como Royston Maldoom, coreógrafo británico famoso por su trabajo en danza comunitaria; Dana Tai Soon Burgess, coreógrafo estadounidense de origen coreano con una visión que fusiona la danza contemporánea con la exploración de la identidad cultural; y Christopher Roman, bailarín y coreógrafo que trabajó en el Frankfurt Ballet bajo la dirección de William Forsythe.
También han contribuido Francisco Centeno, coreógrafo costarricense; Tamara McLorg, coreógrafa británica creadora de la obra "Añoranza" para el Ballet San Marcos; Marc Foeringer, coreógrafo suizo con propuestas innovadoras en la danza contemporánea; Rogelio López, coreógrafo costarricense que en 2001 creó las piezas "Rojísimo sobre blanco" y "El abrazo nuestro de cada día" durante su residencia en la compañía; Susana Linke, reconocida intérprete de la danza moderna alemana; Healther Cooper y Brian Fisher, ambos con importantes aportes a la danza contemporánea.
En 2024, el Ballet San Marcos conmemoró sus 60 años de fundación institucional con el espectáculo Resurgir, presentado el 17 de junio en el Gran Teatro Nacional del Ministerio de Cultura. Este evento incluyó cuatro piezas coreográficas que reflejaron la diversidad y riqueza artística de la institución. Ese mismo año, el Ballet San Marcos participó en Danza Nueva, edición XXXVI, organizado, donde presentó Ello Sensible, obra compuesta por tres piezas coreográficas especialmente pensadas para el festival.

El Ballet San Marcos mantiene un firme compromiso con la difusión de la danza dentro y fuera del campus universitario, desarrollando una intensa labor de proyección nacional e internacional. En los últimos años, ha fortalecido su presencia en escenarios locales y ha establecido alianzas estratégicas con instituciones culturales y educativas que contribuyen al desarrollo de la danza en el país. A través de sus redes sociales y plataformas digitales, ha promovido la visibilidad de sus actividades y proyectos, logrando una mayor conexión con el público y la comunidad artística.
Actualmente, el Ballet San Marcos continúa consolidándose como un referente en la escena dancística nacional. La Escuela de Ballet San Marcos ofrece formación continua en danza clásica y contemporánea a la comunidad sanmarquina y al público en general. Gracias a su labor constante e ininterrumpida, el Ballet San Marcos sigue siendo una institución clave en la promoción y desarrollo de la danza en el Perú.
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